Desde hace unos meses estamos asistiendo al lamentable espectáculo dado por el Consejo Directivo de la FADU (CD) que hasta ahora ha demostrado su incapacidad para cumplir una de sus funciones más importantes: elegir al Decano de la Facultad.
Existe poca información acerca del trasfondo de esta situación, muchas agrupaciones estudiantiles, que deberían informar y movilizar a los estudiantes no lo hacen correctamente debido a los compromisos que tienen con algunos de los grupos en pugna. No es ese nuestro caso.
El Consejo Directivo está integrado por 16 consejeros elegidos el año pasado por los claustros de estudiantes (4 miembros), graduados (4 miembros) y profesores (8 miembros). La relación de fuerzas en el Consejo Directivo podría resumirse en los siguientes tres grupos:
- 3 Consejeros del claustro de estudiantes pertenecientes a La Corriente, que sostienen la postura de abstención frente a esta elección. Ellos dicen que estan combatiendo el sistema por considerarlo antidemocrático, pero es el mismo sistema que les dio los lugares que hoy ocupan.
- 6 Consejeros de Reforma, con representantes de los claustros de profesores y graduados, sostienen la candidatura del Arq. Martín Marcos.
- 7 Consejeros pertenecientes al grupo Coalición-Encuentro, con representantes de profesores, graduados y estudiantes. En este momento este grupo no impulsa un candidato a Decano.
El motivo por el cual aún no hay un acuerdo es la postura irreductible de Reforma que, si bien cuenta con menos consejeros que Coalición-Encuentro, pretende imponer la candidatura del Arq. Martín Marcos de la manera que sea y al costo que sea, aunque ese costo termine pagándolo toda la facultad, y ni siquiera aceptando la posibilidad de encontrar un candidato de consenso con los otros grupos. Cuando se reúne el Consejo Directivo, si prevé que su candidato no cuenta con el apoyo suficiente para ser Decano, boicotea la elección imponiendo un cuarto intermedio prolongando la indefinición con la que extorsiona a toda la FADU. Así lo ha hecho sistemáticamente durante las últimas sesiones.
Esta actitud antidemocrática, fogoneada por las aspiraciones desmedidas del Arq. Martín Marcos, podría ser para muchos un ejemplo más del “conventillo político” que vive nuestro país, sin embargo, esta indeterminación puede perjudicar seriamente a los estudiantes en el futuro cercano. Las actuales autoridades de la FADU son interinas, por lo tanto su autoridad es limitada. Por este motivo, en muchas cátedras se vio impedido el nombramiento de docentes para mantener una relación aceptable con cantidad de alumnos inscriptos. Otra consecuencia grave es que a fin de cuatrimestre no habrá actas de levantamientos de calificaciones ni de aprobación de trabajos prácticos por no existir una autoridad definitiva con atribuciones para refrendarlas.
El ejemplo que están dando estos profesores y graduados en el Consejo es lamentable, muy lejano de los fines de una Universidad que, además de formar profesionales, debe formar ciudadanos.
Los estudiantes no podemos permanecer como simples espectadores de cómo un grupo de irresponsables, que en muchos casos no hacen honor a su cargo de profesor universitario, pongan en jaque nuestro futuro y el de la Facultad. Por eso te convocamos a la próxima reunión de Consejo Directivo el próximo miércoles 19 de mayo a las 11 de la mañana en la Sala de Consejo en Planta Baja, para exigir a todos los consejeros que cumplan con su obligación sentándose en sus lugares y votando un Decano sea cual fuere el resultado.
Digámosles basta de roscas, basta de extorsiones!
Los estudiantes queremos estudiar, estamos hartos de que nos ignoren y hagan de cuenta que no existimos.
Exijámosles que paren de jugar con nuestro futuro!